Se podría hablar mucho acerca de qué parte del cuerpo es la más expresiva. Quizá sea la cara, o quizá la figura, pero hoy me llaman la atención, las manos.
Las manos dicen mucho de la persona, solamente hay que saber leerlas. Fuertes o delicadas, con dedos largos o cortos, proporcionadas o dispares, uñas cuidadas o mordidas... y tantos otros matices.
Hoy traigo unas manos que nos pueden llevar a engaño, parecen delicadas pero a la vez son grandes y fuertes. Una fea cicatriz recorre la muñeca y parte del brazo; eso hace un poco más intrigante la interpretación del dueño (o la dueña) de estas manos.
Espero que disfrutéis elucubrando y sacando vuestras propias conclusiones.